“A personas como yo no se nos espera en este tipo de espacios”

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El politólogo y activista antirracista Yeison F. García López ha sorprendido a mucha gente presentándose a las primarias de Podemos para el Congreso de los diputados y no porque no fuera un rostro conocido en el ámbito del antirracismo sino por lo que implica para las comunidades racializadas y/o migrantes llegar a espacios en los que históricamente hemos estado (y estamos) infrarrepresentadas, en donde se habla de nosotras sin nosotras.
Lo que leerán aquí no será únicamente un retrato escrito de la persona sino también su declaración de intenciones en la que la clase, la raza y el género aparecen, en varias ocasiones, y se entrelazan.


por Lucía Mbomío

Vamos allá.

¿Cómo te gustaría que la gente te conociera?

Mi nombre es Yeison Fernando García López, soy hijo de padre y madre de origen migrante. Nací en Cali (Colombia) y me he criado en diferentes calles y barrios de Madrid. Soy graduado en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense de Madrid (UCM), empecé a estudiar Derecho en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), sin embargo, tuve que dejar a un lado esta carrera para comenzar a estudiar el Máster de Metodología de la investigación en las Ciencias Sociales de la UCM, sólo me queda entregar el Trabajo de Fin de Grado para terminarlo.


Pero no me hables solo del currículum formal, pese a tu juventud llevas muchos años en el activismo

Sí, pero es que nadie de mi círculo cercano esperaba que una persona como yo fuera a la universidad. Ni siquiera yo lo pensaba, siempre fui muy mal estudiante, un pésimo alumno, iba al colegio a pasármelo bien, no prestaba atención a ninguna asignatura, solo una me llegó a llamar la suficiente atención, literatura universal en 2º de bachillerato.

En esos tiempos, estaba con una persona que siempre será muy importante en mi vida. Yo había repetido y ella iba un curso por delante, así que entró a la universidad un año antes. Siempre digo que fueron dos cosas las que me impulsaron a presentarme a selectividad: el hecho de que quería estar a la altura de ella, es decir, también ir a la universidad y la alegría que podía provocar a mi madre el que yo fuera a la universidad. Fui el primero de la familia en ir jajaja.

Una vez entré en la universidad, me di cuenta de la distancia que existía, a nivel de conocimientos, con mis compañeros de clase. Empecé a leer y a asistir a un montón de conferencias de diferentes temáticas para poder solventar esa parte. Fui, de alguna manera, cambiando todo lo que había sido hasta entonces, dejé muchas partes de mí en el barrio y comencé a ir por el camino del activismo. Siempre he intentado combinar el activismo, con los estudios y ambos, con el disfrute de la vida.

Empecé mi activismo en Amnistía Internacional en el grupo DESC (Derechos Económicos, Sociales y Culturales), estuve poco tiempo porque quería más acción, así que me fui a SOSracismo Madrid,al grupo que se encargaba de visitar a las personas encerradas en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche.

Todavía estaba en SOSracismo, cuando Ngoy Ngoma, Gaelle Mbinga y Nayr Macedo fundamos Kwanzaa Asociación Afrodescendiente Universitaria. Fue en SOSracismo y en Kwanzaa donde se desarrolló mi conciencia política.

Y, por terminar esta parte, añadiré que, en la actualidad, soy miembro de la asociación Conciencia Afro, un proyecto cultural- político dirigido a la comunidad africana y afrodescendiente de España.

¿Qué te ha motivado a presentarte a las primarias de Podemos para el Congreso de los diputados?

A personas como yo no se nos espera en este tipo de espacios. A mucha gente le sorprende que quiera postularme a unas primarias internas para formar parte de la lista que nuestro partido presentará en las próximas elecciones generales.

Cuando empecé en el activismo de la comunidad negra de España, mi perspectiva del papel que tenía que tener una persona afro en esta sociedad cambió por completo. Me vi capaz porque que las vi a ellas y ellos, me sentí fuerte porque ellas lo eran. Comprendí la importancia de tener referentes en diferentes ámbitos. Esta sociedad todavía no acaba de entender que la diversidad étnico- racial de nuestro país está en los colegios, en las calles y en los barrios y que necesita de referentes que rompan con los roles sociales racistas que se nos da a alguno de los grupos que formamos parte de él.

Digamos que éste es mi impulso principal, romper con el papel que continuamente se nos da. No somos sujetos pasivos, sino parte del cambio, nuestras organizaciones llevan años luchando por las conquistas sociales conseguidas, llevan décadas trabajando para poder ampliar la concepción de justicia social que se tiene en espacios progresistas.

Antes que yo había mucha gente y organizaciones abriendo camino. Justo ayer, me puse a charlar con una persona negra que lleva más de 30 años viviendo en España y me contaba cómo antes, tenían que pegarse en las calles con los nazis para que no les hicieran la vida imposible. Esa época, según me contaba, eran muy pocas las personas que se escandalizaban cuando se producía una agresión racista.

Se alegraba muchísimo de que no tuviéramos que estar en la misma situación que ellos y ellas tuvieron que vivir y de que, aunque el racismo no haya terminado, se pueda construir desde otras formas y otros espacios es un paso muy importante.

Me presento porque quiero seguir construyendo, imaginando, soñando otro tipo de sociedad y creo que Podemos es el espacio político más sensible a este tipo de planteamientos. No simplemente me siento identificado con muchas de las ideas de transformación social que propone el partido, sino que también, el hecho de haber estado colaborando con Rita Bosaho Gori, primera diputada afro en el Congreso, me ha permitido saber que hay personas dentro de él,  que también comparten la misma idea de sociedad que llevamos defendiendo desde el movimiento antirracista: una sociedad para todas.


¿Cuáles son tus propuestas?

Hay una idea que está desde hace tiempo puesta encima de la mesa y más tras llegada de Podemos y la fuerza demostrada por el movimiento feminista en el pasado 8M. Se habla de feminizar la política, es decir, hacer políticas feministas que cuestionen las relaciones de género y la misma construcción de los roles.

¿Por qué no hablar de incluir el eje antirracista en la política? ¿Por qué no hablar de hacer políticas antirracista que cuestionen las relaciones raciales y la misma construcción de los roles que se producen en esta sociedad?

Antes, hablaba de lo increíble que fue para mí el hecho de encontrar a personas negras que se salían de los roles que constantemente te muestran en los medios de comunicación, en los libros de texto, donde no existimos, en la reproducción de roles racistas de nuestro día a día, el hecho de que una persona se agarre el bolso cuando te ve no es algo baladí, refuerza todo este tipo de construcción, para una parte de la sociedad somos peligrosos.

Hay que empezar a romper con ello y, necesariamente, nosotras tenemos que estar en espacios de poder. ¿Cuánto de poder para cambiar imaginarios tiene el hecho de tener a una diputada afro? Mucho, sin duda. Por supuesto que no es suficiente con el poder simbólico, pero algunas veces pienso y veo que no se tiene en cuenta ni siquiera este.

La lucha antirracista no sólo se refiere al señalamiento de la discriminación racial, sino que también defiende las conquistas sociales conseguidas y, sobre todo, amplía la idea de justicia social que tenemos.

La sociedad española lleva siendo diversa siglos, sin embargo, a raíz de los cambios poblacionales que se han producido por la migración se ha ampliado esa idea de diversidad. Las instituciones deben responder a esos cambios, se tienen que hacer políticas que respondan a esa diversidad.

Yo considero mías muchas de las propuestas que se defienden en el partido porque se dirigen a la defensa de la justicia social para las capas populares empobrecidas por las lógicas neoliberales. No obstante, como proyecto político que busca la transformación social, debemos asumir la responsabilidad de complejizar todas estas ideas con el eje antirracista, para no dejarnos a una parte de la sociedad fuera de nuestros planteamientos.


¿Desde dónde y cómo construir discurso, teniendo en cuenta la diversidad existente en el seno de la comunidad racializada y/o migrante?


Creo que tiene que haber un diálogo constante entre lo que se está haciendo fuera de las instituciones y lo que se hace dentro. Hay que fomentar los espacios de discusión política en los que estén implicadas las diferentes organizaciones que llevan años trabajando por una sociedad para todas.

Este es el funcionamiento habitual en Podemos, por lo menos, en lo que se refiere a la actividad que se realiza en el Congreso de los Diputados. Cuando hay una problemática social, se busca hablar con las organizaciones que trabajan la problemática en cuestión, con el fin de construir diferentes líneas de acción parlamentaria dirigidas a solucionar el problema.

Es decir, yo no me centraría en la idea de desde dónde se construye el discurso. Cada organización o persona puede construir el discurso desde donde quiera, para mí, lo importante son tres cosas: estar en el mismo espectro ideológico, tener ilusión y ganas de trabajar por una sociedad para todas y honestidad política. Poniendo sobre la mesa esos tres aspectos, creo que se pueden impulsar espacios de trabajo para pensar conjuntamente acciones parlamentarias en aras de poner en marcha políticas antirracistas.


¿Y por qué desde Podemos?

Siento que Podemos es el espacio político donde puedo desarrollar las ideas que vengo defendiendo, desde el movimiento antirracista de base. Ya lo dije antes, comparto muchas de las propuestas que se defienden, creo que dentro del partido hay muchas personas que buscan, honestamente trabajar, para devolver la justicia social a las capas populares empobrecidas.

Digamos que, como apunta un gran amigo y mentor, comparto muchos de los elementos que conforman la utopía que puso en marcha Podemos. Y, de alguna manera, soy parte activa de este proyecto político, ya llevo alrededor de un año colaborando con Rita.


¿No temes que te instrumentalicen?


A lo largo de mis respuestas he venido señalando una cuestión importante para mí: Yo vengo del movimiento antirracista de base, vengo de construir desde abajo, es decir, vengo con una conciencia antirracista labrada en la propia militancia. Por tanto, yo me presento a las primarias de Podemos para aportar y no para estar. No se trata de ocupar espacios de poder, se trata de que, desde esos espacios, trabajemos con la vista puesta en poner en marcha políticas antirracistas.

Simplemente, porque creemos en los ideales de justicia social, creemos en la defensa de los derechos y libertades de todas, creemos en un país para todas. Esto es lo que proponemos desde parte del movimiento antirracista.

Cada vez hay más personas afro en el ámbito de la política, ¿eso significa algo? ¿Es fondo o forma?

Significa que cada vez somos más las que estamos rompiendo con los roles sociales impuestos a la comunidad afro. Nos estamos dando cuenta de que nos tenemos construir desde otras ideas, imaginarnos de otra manera, resignificar lo que se ha dicho y se dice de nosotras.

¿Fondo o forma? Quizás todavía estemos más en la forma que el fondo, jajajajaja. Con todo, es muy importante que, por lo menos, estemos en la forma, nos da la posibilidad de discutir políticamente sobre el fondo.

También en los partidos conservadores como VOX...

Si, ya lo hemos visto con la salida a la palestra de Ignacio Garriga.  Aquí es cuando entramos a discutir sobre el fondo, jajaja.

Las cuestiones ligadas a políticas de reconocimiento se quedan muy limitadas y son funcionales al propio sistema si no van acompañadas por ideales que persigan la justicia social, es decir, la redistribución de las riquezas.

Cuando me preguntan sobre este tipo de cuestiones siempre digo lo mismo: A mí no me vale con tener a una Ministra del Interior negra, si ésta justifica la existencia de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE), las redadas por perfil étnico, la violencia constante que hay en la Frontera Sur contra nuestras hermanas y hermanos, etc…

El reconocimiento es un paso hacia la justicia social. ¿Qué ha pasado en Sudáfrica? Se ha acabado con el régimen del apartheid, se han impulsado políticas para la inclusión de la diversidad en los espacios de poder, sin embargo, hay grandes capas de la sociedad, no simplemente negra, pero sí en su mayoría, que viven en unas condiciones inhumanas. Sería injusto no señalar los avances pero más deshonesto sería si nos quedáramos callados ante la desigualdad enorme que existe.

El eje racial se queda corto a la hora de explicar nuestra situación específica como comunidad negra y, en general, como sociedad. Ahí está la complejidad, cuando ponemos sobre la mesa el eje de clase y el eje de género tenemos muchos más elementos para hablar sobre Ignacio Garriga.


¿El hecho de que haya un hijo de una mujer migrante en ese partido es representativo de la desafección existente entre las afrodescendientes nacidas en España y las personas que migran?  

Somos una comunidad enormemente heterogénea, con diversas historias, orígenes, lenguas, situaciones administrativas, con diferencias de clase, de género, de orientación sexual, vamos lo normal de cualquier grupo humano.  

Es normal que se produzcan este tipo de desafección, el ser negro no te conecta automáticamente con otras personas negras, por mucho que algunas lo intentemos cuando vamos caminando por la calle.

Hace unos años, tras leer un texto de Ochy Curiel, escribí un poema y una de las partes viene directamente de ella: “la conciencia no es el resultado sino la condición de un proceso. La identidad nunca es el fin sino el principio de la autoconciencia”.

El ser personas negras no nos lleva al mismo grado de conciencia y es totalmente legítimo.

El desarrollo de la conciencia negra nos lleva, irremediablemente, a conectar con otras luchas que también tienen entre sus ideales la justicia social y la defensa de los derechos y libertades para todas.

¿Y a qué crees que puede estar motivada esa desafección?

A dos cosas: la propia heterogeneidad que he señalado antes y a que estamos en el proceso de construcción de una identidad colectiva que se expresa a través de la palabra comunidad.

La idea de la unión de las comunidades negras lleva siglos pensándose, incluso antes de Marcus Garvey.

Nosotras debemos asumir la complejidad de construir esa identidad colectiva, conectar las diferentes partes que la componen, no perder de vista que nuestro fin es la justicia social y, por tanto, hay que tender puentes a las otras luchas sociales que defiendan los derechos y libertades para todas.

Debemos reconocernos entre nosotras, tener mucho cuidado con pervertir o banalizar una palabra tan importante como comunidad. Es un proceso muy complicado y, a su vez, increíblemente hermoso, no sabes lo que siento cuando un hermano como Marra, de origen senegalés,  me reconoce como su hermano y no porque seamos simplemente negros sino porque lo hemos entendido.

Hablando de VOX, ¿crees que lo que ha pasado en Andalucía es indicativo de algo? ¿De qué? ¿Y en qué posición deja a las personas migrantes?

Las elecciones en Andalucía nos ha mandado un aviso: España empieza a dar un giro hacia los vientos provenientes de Europa, Estados Unidos y América Latina.

La extrema derecha y la derecha están llegando al gobierno o reforzando sus posiciones, a nivel mundial, con discursos claramente racistas, xenófobos, lgtbifóbicos, machistas y clasistas.

El hecho de que lleguen al poder nos plantea un panorama en el que los derechos y libertades de todas están en peligro, estamos perdiendo avances sociales conquistados en favor de un capital financiero cada  vez más depredador.

Achille Mbembe plantea una idea muy interesante, la de devenir negro. La violencia colonial y neo- colonial a la que son sometidos los pueblos negros se expande ahora a las capas populares europeas. La economía capitalista quiere convertirnos a todas en objeto.
Esta misma idea la desarrolla también en el concepto de necropolítica, que, en resumidas cuentas, alude a la capacidad del Estado para decidir sobre la vida y la muerte de sus poblaciones. Los discursos y políticas que defiende la extrema- derecha y derecha son dirigidos a establecer la muerte de lo diferente, del otro que no encaje con sus ideales reaccionarios, es la victoria del capital frente a la vida.

Los discursos racistas y xenófobos ponen a la España no blanca y a la población migrante en una situación de inminente peligro. Estamos viendo cómo los discursos racistas y xenófobos del Ministro del Interior y Vicepresidente de Italia, Mateo Salvini, legitiman la violencia contra las señaladas y señalados.

Lo que no se acaba de ver es que los discurso racistas y xenófobos nos afectan a nosotras primero, por supuesto, pero en sí, es una manera de ir acabando poco a poco con los derechos y libertades de todas, como bien plantea Mbeme, “hoy, todos somos negros en potencia”.

Por todo ello, debemos ver la manera de unir las diferentes luchas para articular respuestas, tanto desde el activismo como desde las instituciones, a las realidades materiales y psicológicas que fomentan el crecimiento de la extrema derecha y la derecha.

Comentabas que has estado colaborando con la primera diputada negra en la historia de la democracia del Estado español, ¿qué has aprendido en este tiempo? ¿Y qué es lo que más te ha sorprendido en este tiempo?

Primero, que hay diferentes formas de hacer política que se escapan de las lógicas tradicionales de funcionamiento interno de los partidos políticos. Rita Bosaho es una trabajadora incansable, una persona honesta que busca, siempre, trabajar en equipo, es muy generosa, es una de mis mentoras, me ha enseñado muchísimo en muy poco tiempo.

Y segundo, me ha sorprendido la enorme carga de trabajo que tienen las parlamentarias y parlamentarios y sus equipos técnicos. Muchas de las veces, este trabajo está ligado a cuestiones burocráticas que son meros arreglos florales de la propia institución. Intuía el enorme trabajo pero no me hacía la idea de tal magnitud.

¿Crees que existe un divorcio entre la calle y el parlamento o una continuación?

Podemos ha abierto una grieta y por ahí están entrando nuevos aires que están transformando la propia idiosincrasia de la institución. No obstante, todavía queda mucho por hacer para que instituciones como el Congreso de los Diputados tenga mayor comunicación con la calle. Se está en ese proceso.

¿Piensas que perderás amistades por meterte en política?

Sí.

Y yo también lo creo… ¿Cuáles son tus próximos pasos?


Ahora mismo, lo único que te puedo decir es que seguiré trabajando con la misma constancia, fuerza y alegría por una sociedad para todas, por los ideales de justicia social que defiende el antirracismo, por las generaciones que vienen, seguiré, sea donde sea, seguiré.

¿Por qué es importante que estés en el partido ?

Debemos dejar de ser cuerpos extraños en espacios de poder, somos parte activa de la lucha, hace mucho tiempo que estamos poniendo los cimientos de esta sociedad desde diferentes flancos, ya es hora de que en los espacios de representación se vea lo diversas y diversos que somos, de que rompamos con la idea de cuotas, de que dejemos a un lado la idea de simplemente estar, es momento de que seamos más de las nuestras y los nuestros, es momento de responsabilidad política, es momento de dar un paso al frente, paso que yo doy hoy.

¿Y cómo podemos apoyarte?


En las votaciones a las primarias de Podemos solo pueden participar las personas inscritas en el censo. Terminan el día 20 de diciembre, así que, si no estás inscrito en Podemos la mejor forma de apoyar la candidatura es difundirla por todas partes.

Hay que tener claro que esto no es una cuestión individual, es un paso colectivo. Por ello, me gustaría pedir también el apoyo a la candidatura de Rita Bosaho Gori, mi mentora; Aida Quinatoa, mujer de origen ecuatoriano, una de las fundadoras de la Plataforma de Afectadas por la Hipoteca (PAH) y para Litzi Bianca Roja, hermana boliviana que se presenta para el Senado.

¡Mucha suerte!