“Propuse un fisting público para los hombres de la política porque no es posible  que gente que ni conoce su ano nos gobierne”

Foto Operación Queer. San José, Costa Rica, 2019. Performance ejercicios para la sensualidad

Foto Operación Queer. San José, Costa Rica, 2019. Performance ejercicios para la sensualidad


Un cuerpo potente. Un cuerpo cimarrónicx, de la diáspora. Johan Mijail traspasa las fronteras de géneros y las fronteras de los estados-naciones asesinos, siempre con la fuerza de Oggun y con la energía amorosa de Oshun. Incomprendidx por y con la fuerza política de la analidad, de la animalidad y con una poesía afilada que cautiva. Escritorx, poeta, performance, vibrante como el dembow, intensx como la Bachata. Esta entrevista es un lindo fracaso, es insuficiente para conocer las andanzas y la subjetividad de esta hermanx transmarica.


By iki yos piña narváez

@parchitapower


IY:¿Quién es Mijail?

M: Un proyecto corpo político de la disidencia sexual no blanca. La experiencia de una posibilidad desobediente al régimen heterocisblanco dominante. Una puesta en escena de preguntas que junto a una multitud históricamente omitida exige una reparación material y simbólica. Mijaíl es un nombre comunista que no decidí. Soy es siempre un no es. Estoy, entonces, intentando articular una voz cimarrona, aprendiendo a mirar mejor, a fracasar mejor. Soy una crisis al capitalismo heterosocial de la seguridad que no tengo. Una activista transmarica que nació en república dominicana, un país (aquí las cursivas, aquí las comillas) clave para  intentar entender el colonialismo. Un país donde todavía soy una vergüenza.

IY¿Que significa para ti ser una persona negrx, disidente sexual-migrante-caribeña?

Un problema para ubicar mi cuerpo en algún espacio. Todavía no sabemos entender que somos unas diásporas de un continente ideológicamente saqueado de sus futuros mediante sus cuerpos.  Ser negrx descendiente es conectarme con toda la experiencia que habita el cuerpo de mi madre y que no porto en su totalidad porque aprendí a leer y a escribir y ahí se me desdibujó la vida: en la piel y la migración geográfica y de género. En la pulsión escritural que tengo. Lo intenté y eso que se me nota después me quitó todo. Pero obvio que el caribe me lo devuelve porque aunque aquí confundimos la alegría con la felicidad, vivimos entre la realidad real de las metáforas de las olas y eso es algo importante. La pasamos bien entre gobiernos corruptos que ni siquiera son capaces de darle energía eléctrica y agua potable a la gente. Tenemos que intentar  alternativas: yo propuse el amor vegetal como un analquismo, pero se rieron de mí, me repostearon por redes sociales de internet como un enfermo mental, como un demente, como un traidor a su estabilidad estética-política porque veo en el espacio anal un lugar para la producción reflexiva de las vidas en resistencia sexual. Propuse un fisting público para los hombres de la política porque no es posible que gente que ni conoce su ano nos gobierne, pero de nuevo se alarmaron diciéndome " no puedes decir eso aquí". 

IY:¿como reivindicas tu sexualidad en tus espacios cotidianos?

M: Mediante el disfrute y la escenificación de la misma. Expresándola. Digamos, haciendo, diciendo: aquí estoy. Artículo un cuerpo sexual pero también sensual donde me muevo. 

IY: ¿Que significa la Poesía y la escritura para tí?

Mi vida. Además del amor por Jorge y otros más, la escritura lo es todo para mí porque me actualiza el espíritu. Desde ahí me hice una profesión: escribir libros y es lo más serio y político que hago porque tomé posición y mediante las letras quiero generar un archivo político de la experiencia de un cuerpo no hegemónico, etílico, analético, difícil. Ahora armo una editorial para publicar otras experiencias negras y afrodescendientes. Ya no quiero nada con gente blanca y/o blanco mestiza. Me copian mis ideas. No saben vivir ni su blanquitud, ni su mestizaje. 

IY¿háblame de tus trabajos, tus escrituras encarnadas?

M: He desarrollado varios proyectos de escrituras y son registros de lo que voy sintiendo y viviendo. Pordioseros del caribe es un libro donde Santo Domingo is burning. Los maricones y las travestis le piden conexión a los misterios para sobrevivir a la historia y a Hipólito Mejía. Al propio padre que se fue a Nueva York y trajo el carro Toyota, las zapatillas Nike, el súper nintendo mientras yo por ejemplo con toallas en la cabeza quería ser Thalía. Pero nada fue. Nada fue. Y fue y volvió en inflamadas de retórica libro escrito junto a un activista chileno, muy mala gente, Jorge Díaz de la cuds. Después publiqué un manifiesto antirracista donde hablo de mi experiencia migrante en el sur global, específicamente en Chile el país de las detenciones por perfil racial, de la ley de extranjería ideada en la dictadura de Pinochet, de las expulsiones masivas de haitianos, de los inmigrantes. Ahora escribo una novela sobre el Chapeo donde hablo sobre el colonialismo y su hetero blanca y cis dominación.

IY:¿Qué ha sido lo más difícil y lo más interesante, curioso, particular o agradable de tu relación con otras personas disidentes sexuales en tu diáspora?

M: Lo más difícil ha sido ver como olvidan lo que significa ser un sujeto que está siendo ilegalizado por un estado nacional por ser inmigrante. Lo interesante poder trabajar colectivamente para hacernos desde las diferencias una posibilidad. Lo curioso es su profundo racismo y deseo de inclusión en proyectos de cuerpos no blancos para decir que no son racistas. Lo agradable estar siempre armando las maletas para irme.

IY: ¿Qué haces para autocuidarte, defenderte ante ataques cotidianos o cuando te sientes frágil?

M: El amor. Como inmigrante me enfoqué en aquello y ahí encontré destellos que desdibujaron muchas veces el racismo y la exótica visión que tienen nuestros cuerpos afrodescendientes en lugares de producción de imágenes y conocimientos. Busqué refugio biopolítico y sexo afectivo en  sujetos-cuerpos nacionales. La brujería también, tomar de más, para borrarme.

IY¿Crees que necesitamos estar presente como negrxs, disidentes de género: trans, bolleras, faggotz, queer, bisexuales en todos los espacios? ¿o es un precio muy alto el que pagamos? 

M: Creo que las personas negras y afrodescendientes debemos de buscar la forma de estar entre nosotros. Conocernos. He estado en muchos lados y el mundo es desagradable porque destella por todos lados pulsiones de blanquitud y heterosexualidad. Igual es interesante transitar espacios, entra y salir, hacer escándalos. Pero siempre alerta nunca insertarse en su totalidad pues esas experiencias que están en todos lados no tienen que ver muchas veces con nosotros. Quizás tenemos que inventar un nuevo batey, nuevos palenques sin esencialismos.

IY¿Qué nos queda por conseguir a 50 años de stonewall? 

M:Que el/la/le sujeto/a/e trans del sujeto subalterno hable.

IY:¿Sientes que tenemos que reivindicar nuestras sexualidades ancestrales para escapar del dispositivo normalizante  de la lucha TLGBQ+ contemporánea?

M: Completamente, un activismo disidente sexual antirracista debe de traicionar siempre la concepción heterosexual occidental y sus réplicas en lo TLGBQ+ Queremos la sexualidad de Oshún y Shangó al mismo tiempo. La conexión con las plantas.

IY¿Qué le dirías a todos lxs blancxs de la comunidad TLGBQ+ que se abandera de la lucha de disidencias sexuales y desconocen que vidas/cuerpos iniciaron las revueltas de Stonewall? 

M: Que estamos preparando un duelo al planeta.


negrxsMGZ AF