"Estamos haciendo historia, representamos a toda una comunidad y debemos disfrutar de esto”

Fotografía por: Victor Torres

Por: Lucía Mbomío

Matías Janick Engura Amugu es actor, modelo, productor y ha sido nominado como mejor actor novel en los premios Goya por su interpretación en “Historias lamentables”, una película dirigida por Javier Fesser. En el film da vida a Ayoub, un inmigrante africano de corazón enorme y paciencia infinita. 

Detrás de este reconocimiento, hay un trabajo de más de una década en la que ha estado vinculado al ámbito audiovisual, soñando sin límite y creando sin miedo. Su intención, pase lo que pase, es continuar haciéndolo.

Estás de enhorabuena, ¿cómo te ha sentado esa nominación? ¿Lo imaginabas?

Creo que la respuesta más sincera que puedo dar es que no sabría describir los sentimientos que tengo respecto a la nominación. Al principio, me sentí abrumado e incrédulo, con el paso de los días, lo he ido asentando un poco y he aceptado que es una realidad.

En lo concerniente a si lo imaginaba… bueno, llevo trabajando toda la vida en este sector, de una u otra forma, y ahora como que todo el trabajo de todos estos años se ha visto recompensado con la nominación. Soy consciente de que esto es una responsabilidad, sé que la nominación no es solo por y para mí, hay mucha más gente que está detrás, que va a estar pendiente de esto y que, en cierta forma, se sentirán representados por mí. Pues bien, acepto esta responsabilidad, creo que estoy preparado para ello. 

 Si me centro en cómo me siento, debo decir que, sobre todo, ansioso por que llegue el día, pero también sereno. Soy una persona que ha aprendido a vivir el momento. Sin duda, el momento de la nominación fue increíble, pero la vida sigue y yo soy un chaval normal, de a pie, de barrio, eso sí, con muchos sueños y que no duda en ir detrás de ellos. Digamos que este es el resultado de la persecución de un sueño que tenía desde chico y que por fin se ha hecho realidad. 

¿Cómo han reaccionado tus seres queridos? 

Yo creo que igual que yo, no se lo pueden creer. Imagino que en cuanto se enteraron, se quedaron un momento en shock y, seguramente, tuvieron que preguntarse “Janick el que yo conozco u otro?”, jajaja. Esta semana, sin lugar a dudas es la que más ha sonado mi móvil, tanto es así, que he tenido que apagarlo y silenciarlo porque no daba abasto de tanto mensaje y llamada. Todos están alegres, contentos, orgullosos y deseando que llegue el día. Muchos no habían visto la película y tras la nominación, se han puesto las pilas para verla, me han felicitado por la labor y hasta se han sorprendido por la calidad de mi interpretación. Creo que el sentimiento general es de orgullo, de satisfacción. Un amigo me dijo “ahora estás abanderando a toda una comunidad, no sé si eres consciente de ello”. No sé si soy consciente, eso es cierto, pero sí sé que, como he dicho, esto es una responsabilidad que acepto con los brazos abiertos. Me siento más pleno y mejor que nunca y ese sentimiento es compartido por todos mis seres queridos. 

¿Hasta tu nominación, les hacía gracia que te dedicaras a este sector o lo veían como un mero entretenimiento? ¿y ahora qué? 

Para empezar, mi familia jamás se ha opuesto a lo que yo me he dedicado. Siempre han sabido que me dedicaba a algo que tenía que ver con las cámaras, pero nunca han profundizado. Ahora, con la nominación, han puesto sus ojos en mí y me preguntan “¿o sea que esto es lo que has estado haciendo todo este tiempo?”, ja, ja, ja. Es la forma más clara en la que puedo resumir las reacciones de mis familiares.  Creían que lo hacía para matar el tiempo, ahora que han visto que las cosas se han puesto serias, han saltado las alarmas y piensan “espera, has llegado a los Premios Goya? No te creo”. Con todo, siempre me apoyaron y algo que agradezco mucho es que me siguen tratando como antes.

“Simplemente me han felicitado y hemos continuado con nuestras vidas, de una manera normal. Para eso está la familia, para mantenerte con los pies en el suelo. ”

Centrémonos ahora en “Historias lamentables”, la película en la que has trabajado, ¿por qué, aparte de para verte a ti, deberíamos ir a verla? 

Aparte de que es súper divertida y entretenida, “Historias Lamentables” cuenta una historia global desde diferentes puntos de vista. Aunque se lleven a un extremo, bien es verdad que tal y como el propio director, Javier Fesser, dice, a cualquiera de nosotrxs nos puede pasar algo tan absurdo y disparatado como lo que sucede en las películas. 

Por eso, si el espectador ve la película, es probable que pueda sentirse identificadx con alguno de los personajes o de las situaciones. 

Para concluir, diré que aparte de hacer mucha gracia, el film transmite un mensaje global, fácilmente entendible. 

¿Y cómo es actuar bajo las órdenes del director Javier Fesser? 

Para mí, es el mejor director de este país por varios motivos. Aparte de por su larga trayectoria y su visión, Javier Fesser tiene el valor de dar oportunidades a personas que rara vez cuentan con ellas. Tiene claro lo que quiere, cómo lo quiere, cuándo lo quiere y lo mejor es que sabe transmitirlo. Recuerdo que, en ocasiones, cuando estábamos grabando, entre toma y toma, le veía mirando a la nada y estoy seguro de que, en ese momento, él ya estaba viendo el resultado de la película y montando cada secuencia en su cabeza. Por si eso no fuera suficiente, tiene muy claro cómo transmitir lo que quiere tanto a los técnicos como al elenco y al grupo artístico. Es un genio. Se nota su experiencia, su tacto, lo claro que lo tiene, su firma y su gusto en cada uno de sus trabajos. Es la persona más profesional con quien he trabajado, y me ha servido para aprender y absorber mucha información. Es de los grandes directores de este país. 

¿Qué destacarías del personaje que interpretas en el film, Ayoub? 

Su bondad y su paciencia. Ayoub tiene una bondad que, a día de hoy, es escasa. Se está buscando la vida y lo hace con una sonrisa porque tiene un corazón inmenso. Logra captar y enganchar al espectador porque roba corazones. Se lo he comentado a algunas personas en su momento, creo que lo único que tenemos Ayoub y yo en común es que tenemos ocho hermanos. Por lo demás, nada, porque yo diría que la bondad y la paciencia que Ayoub demuestra en este film, nadie es capaz de alcanzarla. 

Para llegar hasta aquí, has tenido que esforzarte mucho, seguro. De entrada, tú te formaste en audiovisuales y tienes experiencia delante de cámara, como modelo, pero también detrás, ¡cuéntanos!

Esta nominación, tal y como he comentado un poco más arriba, es el resumen de doce años de esfuerzo. Yo estudié producción audiovisual, radio y espectáculo. He trabajado en la radio; he organizando eventos; he trabajado en la tele, ahora, en el cine; he dirigido videoclips; he producido mis propios cortometrajes; he producido y guionizado (estoy en ello) mi primera película; he desarrollado una serie; he hecho documentales; he tirado fotos , no sé… Me llama mucho la atención todo el mundo audiovisual en general, no descarto nada porque para mí es enriquecedor. 

He llegado a trabajar totalmente gratis, simplemente para recabar información y experiencia. Esto es importante y la gente no suele tenerlo en cuenta. Sin embargo, cuanta más experiencia y formación tengas, más seguro irás en este o en cualquier otro sector. Personalmente, quiero seguir aprendiendo y abriéndome puertas. 

Y no solo has trabajado en España, de hecho, has pasado por la televisión de Guinea Ecuatorial, ¿cómo fue tu experiencia allí y qué aprendizaje laboral te trajiste?

Siempre he dicho y siempre diré que mi vida se divide en dos partes: antes de Guinea Ecuatorial y después de Guinea Ecuatorial.  Guinea me dio una oportunidad que España no me dio: poder trabajar en la televisión nacional del país. Cuando yo llegué ahí tuve libertad de creación, eso nos permitió, a mí y al resto del equipo , crear nuestro propio concepto. Es un país que me ha enriquecido a nivel laboral, pero también personalmente. Después de venir a España de niño, yo solo había ido de vacaciones. Instalándome ahí, tuve la oportunidad de poder conocerlo bien. 

Me he llevado un montón de experiencias y vivencias de Guinea. Es más, creo que no hubiera llegado hasta donde estoy actualmente si no hubiera residido en Guinea.  Cuando viajas a África algo en ti cambia para siempre... Antes de ir para allá, yo ya había pensado incluso en abandonar el sector audiovisual, Guinea me dio fuerza y fuelle para continuar. 

¿Vivir en el continente africano te ha ayudado a construir tu personaje, Ayoub?

Francamente, creo que de no haber vivido en Guinea, no hubiera podido interpretar de la misma manera a Ayoub, un inmigrante de África subsahariana.  Cuando estaba creando el personaje, me nutría de muchos amigos africanos de países distintos. También de mis charlas con familiares de Guinea y de mis propias experiencias allí. Al principio, me costó un poco porque no sabía cómo enfocarlo, con todo, vivir y conocer aquello ha provocado que Ayoub sea más creíble.

Continuemos con Ayoub, ¿cuánto margen has tenido tú para darle tu toque personal? Lo digo porque el chasquido ese que hace con la lengua es muy reconocible en muchas partes de África. 

He tenido bastante tiempo para poder llegar a lo que quería plasmar con Ayoub, pero por ejemplo, el chasquido lo hice en el mismo casting porque es algo que llevo oyendo toda la vida en mi propia familia y en mi círculo. Yo mismo lo hago para indicar que algo me molesta. Quizá, eso fue lo que más le gustó al director cuando hice la audición y me salió muy natural. 

¿Y qué hay del acento? ¿Te costó inventarlo y mantenerlo durante todas las secuencias?

El acento de Ayoub no viene de ninguna parte específica de África sino de todas, no quería que se relacionara de manera específica con ningún sitio. Me lo saqué de la manga, no creo que ningún africano se sienta identificado con él, pero en cuanto lo oyes te suena made in África. 

Al principio, no sabía qué acento darle, me sentía raro, pero cuando lo encontré, supe que quería tirar por ese lado y decidí empezar a hablar con ese acento a todo el mundo: a mis amigos, a mi familia, a mi madre... Luego le di los matices, la manera de andar, la gestualidad, la forma de fruncir el ceño… Es como si, a partir del acento, saliera todo lo demás. 

Cuando Javier Fesser decía “corten” volvía a hablar como siempre y una vez reanudábamos la grabación, el que hablaba era Ayoub. 

Adam Nourou, el joven que hace de Massar en la película “Adú”, también ha sido nominado. El hecho de que dos personas negras seáis elegibles para ganar un Goya es, sin duda, un motivo de alegría, ¿cuánto crees que ha contribuido en ese reconocimiento de vuestro  trabajo el hecho de que se hayan creado colectivos de actores y actrices negros, como  “The Black View”, “Tinta negra” o “Limbo”, que reivindican vuestra participación en la industria cinematográfica? 

Exacto, es histórico. He tenido la oportunidad de hablar con Adam, le he felicitado por la nominación y le he dicho exactamente eso “estamos haciendo historia, representamos a toda una comunidad y debemos disfrutar de esto”. 

Los diferentes colectivos de España han tenido que ver con los resultados no solo de las nominaciones sino de los Goya en general, porque aunque no estén nominados ahora, hay varixs intérpretes que también fueron candidatos en su momento. 

¿Adam te respondió?

¡Claro! Me dijo que es consciente de ello. Ambos coincidimos en que estamos disfrutando de un momento que ojalá vuelva a repetirse en el futuro. 

Yo he trabajado con “The Black View'' y con “Limbo”. Los dos colectivos han hecho un gran esfuerzo desde su creación para que las actrices y los actores negros tengan visibilidad, con el objetivo de que el cine español cuente con nosotros. Somos privilegiados por poder vivir este momento y somos conscientes de que somos referentes para otros actores y actrices. Ahora ya no se puede decir que no hay referentes. Claro que los hay, y las generaciones futuras vivirán otro presente.  Agradezco a estas organizaciones, pero también a quienes me precedieron y pensaron que sí era posible actuar.  

¿Y cuánto que el activismo antirracista se haya hecho más visible  (porque existir ya existía) para la gente blanca, a raíz de las manifestaciones de BLM? 

Por desgracia hemos tenido que llegar a un punto, y ya no hablo solo del cine, sino en general, en el que hemos tenido que darle nombre a un movimiento para que se nos escuche. Y, por desgracia, la chispa que encendió todo esto fue la muerte de George Floyd en EEUU, que conmocionó al mundo y que llegó en un momento histórico por el tema de la COVID. Yo siempre he dicho que somos nosotrxs mismxs quienes debemos generar el cambio y que si queremos que se nos escuche, tenemos que hacer cosas para ser escuchadxs.  La pena, repito, es que hayamos tenido que llegar a este punto. Sin embargo, es bueno que las partes afectadas por el racismo, el machismo o la LGTBIfobia levanten la voz y recuerden que estamos aquí y que hemos venido a aportar. Es una práctica que, simplemente, debería desaparecer y el cine no puede estar al margen.  Aún queda mucho por hacer y hay que seguir luchando. 

Sin embargo, a mi modo de ver, no solo es importante lo cuantitativo sino también lo cualitativo. Debo decirte que actúas genial, me has gustado mucho, ahora bien, me apena que las actrices y actores negros siempre tengáis los mismos papeles que, de alguna manera, acaban por reforzar un imaginario muy limitado de la comunidad negra en el Estado español. No te voy a poner en el brete de que comentes esta reflexión, pero sí que me gustaría saber qué rol te gustaría interpretar en un futuro próximo. 

Entiendo que la comunidad negra no se sienta representada por este tipo de papeles, que refuerzan un imaginario que no es del todo real. Con todo, también hay una parte de la población negra que se puede sentir identificada debido a que su experiencia vital es similar a la que se narra: han venido en patera, están en situación administrativa irregular y tienen ciertos problemas. No obstante, esa no ha sido mi vida. Yo llegué con tres años y en avión. Podría decirse que se nos encasilla y estereotipa y, por tanto, animo a lxs guionistas, sobre todo, que intenten ir un poco más allá porque una cosa que tiene nuestro sector es que nos da un amplio margen de creación ergo, una persona no blanca y/o migrante puede hacer cualquier tipo de papel. 

“Podría decirse que se nos encasilla y estereotipa. Animo a lxs guionistas, sobre todo, que intenten ir un poco más allá porque una cosa que tiene nuestro sector es que nos da un amplio margen de creación.”

También es verdad que yo, que llevo 30 años en este país, no digo que no existan pero no he visto a ningunx policía negrx ni a ningunx profesorx negrx o a conductores de autobús que lo sean. Tampoco a muchxs presentadorxs de televisión. Por eso, el cine español no ve como algo común representar esos roles, puesto que se basa en la observación de la sociedad en la que habita. Ojo, al propio español puede pasarle en el extranjero, donde le leen como alguien a quien le gustan los toros o la siesta. Por desgracia, el ser humano tiende a encasillar para poder organizarse. Sin embargo, creo sinceramente que tarde o temprano esto irá cambiando y fruto de ello es nuestra nominación. A raíz de esto, aparecerán otros papeles. De hecho,ya han aparecido. Solo hay que pensar en Emilio Buale en “El Hoyo”, donde interpreta un papelón increíble. 

Por otro lado, la labor de un actor o de una actriz es meterse en un personaje, independientemente de si le gusta o no, de si está de acuerdo o no. Ahí demuestras tu profesionalidad, lo que puedes hacer. Por tanto, si unx guionista crea un papel de un migrante africano, no sería muy lógico que lo hiciera unx noruegx blancx, rubix y de ojos claros, lo tendría que hacer alguien negrx. 

¿Qué considero que deberíamos hacer para que esto cambie? Opino que todo el mundo quiere estar en la portada, pero nadie detrás. Que la gente prefiere ser actriz o actor, ahora bien, ¿qué hay de lxs directorxs, guionistas o productorxs? 

Mi lema en esta vida es “deja que el trabajo hable por ti”. Animo a quienes no estén de acuerdo con estos estereotipos a que propongan algo y que ocupen diferentes sectores dentro de la profesión: desde el estilista hasta la directora de fotografía, etc… Formémonos y ocupemos puestos para mostrar que el cine también se puede hacer así. De hecho ya está pasando eso en Francia, Reino Unido o EEUU. 

¿En qué película del pasado te hubiera gustado participar? 

Soy muy de cine negro, de pelis de gangsters, de Tarantino y de Scorsese y me encantaría hacer papeles de antagonistas, de lo contrario a lo que soy porque ese es el reto del actor: meterte en el personaje. Me encantaría hacer de malo malísimo, algo súper visceral, cruel, alguien a quien el espectador odie. Un papel que me encantó fue el que interpretaba Denzel Washington en “Training Day”. 

Aparte, me gusta mucho el cine de barrio, protagonizado por personas de a pie y en el que se cuentan historias que se pueden dar en cualquier periferia. En estos lugares se dan problemas sociales, sentimentales o económicos con los que el público se puede sentir identificado. 

Y qué hay del teatro, ¿te animarías a subirte a un escenario a interpretar?

Por supuesto, me encantaría. El teatro es donde realmente el actor muestra sus capacidades ya que no se puede arreglar en la edición, no hay un “corten”. Es un “aquí y ahora” y solo están los profesionales y el público. Me parece un reto y yo los retos los acepto porque me hacen crecer.

¿Qué cosas te planteas ahora o, más bien, te atreves a soñar ahora que hace tiempo ni se te pasaban por la cabeza, en términos laborales?

Si te digo la verdad, me sigo planteando lo mismo porque siempre he sido una persona muy ambiciosa. He querido llegar a más y esta nominación, para mí, es un escalón que me sirve para seguir creciendo. Si es verdad que con lo que me ha pasado, se me hace más real,  más cercano. Me planteo cualquier cosa en nuestro sector audiovisual. La ambición no es mala, es el motor de las inquietudes de las personas. Soy un soñador y sueño con trabajar con los mejores, en las mejores producciones y crecer. 

Ya que estamos en los futuribles, ¿barajas dirigir un film en algún momento de tu carrera? De hacerlo, ¿sobre qué sería? ¿y con qué elenco?

Me encantaría, y es uno de los sueños que me quedan por cumplir, aparte de muchos otros. Es más, como ya he dicho antes, he guionizado mi primera película. Estoy desarrollando una serie y tengo un montón de ideas que también me gustaría llevar a la práctica. Así que sí, en algún momento me gustaría hacerlo, si bien es cierto que ya he dirigido algunos cortometrajes y que un largo son palabras mayores.

 Sobre qué sería, pues eso, cine negro e historias de barrio, porque yo soy un chaval de barrio y sé que en la esquina de tu manzana podrás encontrar historias fascinantes dignas de plasmar en dos horas en una película. Sería un placer contarlas y también otras en las que el antagonista tiene peso, sin final feliz yupi… También me gusta la ciencia ficción, pero eso más adelante porque tiene un trabajo aparte. 

En cuanto al elenco, debo decir que no tengo preferencias. Si algo he aprendido con Javier Fesser es que hay mucho talento en muchas partes y que mucho está oculto. Obviamente, me encantaría trabajar con actores conocidos, pero no me olvidaría de todo ese talento pendiente de descubrir. Quizá no lo sabemos todavía, porque aún tienen que darle una oportunidad, pero… puede que ya conozcamos al próximo ganador de un Goya. 

Queda muy poquito para el 6 de Marzo, fecha en la que se celebrará la gala de entrega de los premios Goya. Hasta entonces, disfruta y después, pase lo que pase (que serán cosas buenas), continúa brillando.